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Presente y futuro de la generación distribuida
Bienvenidos de nuevo,
Después de haber introducido el tema de la generación distribuida en el primer post que publicamos el otro día, hoy nos proponemos explicar por qué creemos que a corto o medio plazo esta vía de generación de energía tiene capacidad para seguir creciendo y mejorando su eficiencia convirtiéndose así en una importante alternativa a las grandes estructuras (generadoras de energía) que hoy día conocemos.
Hay que destacar que hasta el año pasado las leyes no permitían el consumo de la energía que uno mismo producía y obligaba a vender la energía a las compañías eléctricas de forma que éstas volvían a venderla. Gracias a la aprobación del decreto que regula las instalaciones de pequeña potencia, aprobada por unanimidad antes de las últimas elecciones, ahora se está llevando a cabo el proceso de la tramitación del decreto para regular el balance neto, lo cual, se puede decir que convierte a la persona en dueña de la energía producida y por tanto es posible consumir de lo que uno mismo produce. Os preguntaréis qué ocurre en los casos en los que la producción no llega a la demandada, pues en dichos casos se puede comprar la electricidad a la empresa energética que uno quiera. Y en los momentos en los que la producción superé la demanda, se podrá vender a una compañía eléctrica la cantidad sobrante.
Entre otras ventajas, esto supone un ahorro importante en la pérdida de energía a la hora de transportarla además de la independencia que proporciona respecto a otras fuentes de energía. Y por tanto, un paso importante hacia el autoabastecimiento. También hay que subrayar que estas fuentes de energía son limpias, esto es, son respetuosas con el medio ambiente a diferencia de otras fuentes tales como los combustibles fósiles.
Si se regula con sentido común, no hay ninguna razón lógica para impedir que un edificio haga las dos cosas indistintamente: producir y autoconsumir energía indistintamente, es decir, sin imponer limitaciones administrativas allí donde la tecnología no impone restricciones. Greenpeace
Además, esta energía puede ser utilizada de manera directa o bien ser almacenada en acumuladores o baterías para su uso posterior, en horas nocturnas o cuando sea necesaria. Al fin y al cabo, consumiremos menos energía del resto del sistema.
En conclusión, la generación embebida es la unión de diferentes pequeñas fuentes de energía. Las próximas semanas iremos estudiando cada una de éstas.
Fuentes:
reevEnergy 